Conoce cuáles son las alergias de otoño y cómo evitarlas
Las alergias han dejado de ser exclusividad de la época primaveral, como generalmente sucede. Desde hace unos años, ya lo son para todo el año: la demanda de fármacos para poder respirar ha crecido este año un 9,3% respecto a niveles previos a la pandemia, según el último análisis del Observatorio de Tendencias Cofares, cooperativa líder en distribución de medicamentos en España, y realizado en colaboración con Cipla, laboratorio especializado en salud respiratoria.
Además, sentir picazón en la nariz, los estornudos frecuentes y la irritación de ojos son síntomas cada vez más frecuentes en otoño e invierno debido a otros pólenes o por la exposición a animales, ácaros del polvo, u hongos ambientales.
Los cipreses son árboles que florecen en los meses de invierno y, con los años, los pacientes con alergia al polen pueden tener también síntomas en diciembre, enero y febrero. Otra planta que puede dar problemas alérgicos en el otoño es la artemisa, aunque solo afectará si se está a pocos metros de ella, porque su polen se desplaza a pocos metros de distancia de su origen.
Por otra parte, no todas las plantas realizan su polinización en primavera: algunas lo hacen en otoño. Es el caso de las cupresáceas (cipreses, setos, etc.) y las amarantáceas (como el cenizo blanco), a las que se debe añadir la quinoa, de la que España es uno de cuyos principales productores en Europa.
Más factores que producen alergias
En general, la llegada del otoño trae consigo la bajada de temperaturas y, por tanto, un mayor uso de la calefacción en los hogares. La menor ventilación, junto con el aumento de la humedad ambiental, crean la situación perfecta para la proliferación de los ácaros del polvo.
¿Cuáles son las alergias típicas en otoño?
- Rinitis alérgica: es una reacción de las membranas de la mucosa de la nariz después de una exposición a ciertos alérgenos, como el polvo o el polen. En ocasiones, puede acompañarse de síntomas asmáticos.
- Asma predominantemente alérgica: es secundaria a alérgenos como ácaros, pólenes, epitelios de animales, hongos, o alimentos. Es la clase de asma más frecuente.
- Alergias alimentarias: en el caso de los más pequeños, la alimentación fuera de casa y el incremento de probabilidad de exposición ante alérgenos alimentarios, hace que el otoño sea una época típica en la que se den estas alergias.
- Alergias a mascotas: de igual manera que en el caso de los ácaros y los hongos, el descenso de las temperaturas hace que permanezcamos más tiempo en casa, y que, por ello, sea más probable que aparezcan alergias a los epitelios de estos animales.
- Dermatitis atópica: el otoño en sí mismo no tiene por qué empeorar sus síntomas, pero el regreso a la ciudad después del verano, el uso de lana o el frío, entre otros factores, suele provocar que la dermatitis atópica vuelva a manifestarse de forma más aguda.
¿Cómo se puede combatir las alergias de otoño?
Si bien hay algunas medicaciones que podrían ayudarte a tratar las alergias de otoño, estas estrategias podrían serte buenas aliadas y así prevenir el tener que tomar medicamentos:
- Mantener la vivienda ventilada y no hacer un uso excesivo de la calefacción.
- Cambiar los filtros de la calefacción y del aire acondicionado, con el objetivo de evitar bombear aire con polen o ácaros.
- Evitar los peluches en las camas de los niños, y lavar con frecuencia las sábanas, así como limpiar el polvo con regularidad, con más empeño si cabe en los dormitorios.
- Usar una mascarilla al barrer hojas caídas. Evitarías así respirar las esporas de moho.